La mejor forma de llevar los esquís y el equipaje de invierno cuando vas a esquiar es la que mejor se adapte a tu vehículo y a tu estilo de vida. A nivel general se puede hacer de dos formas:
La primera es que puedes llevar los esquís en el interior del vehículo. Esta no es siempre una opción legal porque los esquís cuentan como carga y en teoría no puedes utilizar tu vehículo para transportar carga. Esta opción es viable también en función de las personas que viajéis porque, en el interior, no siempre se cuenta con el espacio deseado.
La segunda alternativa es llevarlos en el exterior. Aquí puedes escoger entre cinco formas de transportarlos.
- Portaesquís de techo. Es la opción más habitual aunque están expuestos a recibir todo tipo de agentes, así que es recomendable llevarlos en una funda para que no se ensucien y luego tengas que darte la paliza de limpiarlos.
- Portaesquís magnético. Es muy fácil de montar, pero menos seguro en caso de accidente.
- Portaesquís bola de remolque. Puede transportar hasta seis esquís, por lo que aumenta el consumo de combustible.
- Portaesquís de rueda. Está pensado más que nada para los vehículos 4×4 ya que va acoplado a la rueda de repuesto que está colocada en la parte trasera del vehículo.
- Cofres. La gran ventaja es que dejas libre el maletero para poder guardar el equipaje y otras pertenencias que necesites en tu viaje. La desventaja es que es mucho más caro que las opciones anteriores y consume también mucho más combustible.
Como ves hay muchas opciones para diferentes tipos de vehículos y personas, solo tienes que valorar el conjunto que te ofrecen las diferentes opciones y elegir cuál es la que te viene mejor para tener un viaje lo más cómodo y seguro posible.
